El motociclismo prácticamente no posee límites, por lo que existen cientos de modalidades, incluso algunas que solo se practican en determinadas regiones y no son muy conocidas. Entre las más conocidas, aunque de las más populares, se encuentra el supermoto, nombre que recibe la mezcla entre el motocross y el motociclismo de carretera. Este deporte se realiza en pistas en las cuales hasta las tres cuartas partes son de terreno pavimentado y el resto se desarrolla en zonas de tierra, lo que aumenta la dificultad del recorrido.
Las motocicletas empleadas son también mezclas entre las que se usan en ambos deportes, al igual que los trajes utilizados por los conductores y el resto de los elementos. Son carreras predominantemente lentas, en las que no se alcanzan los 200 kilómetros por hora, con numerosas curvas, donde lo principal son las habilidades que pueda demostrar el conductor del vehículo y no se depende tanto de tener un motor de gran calidad. Las carreras de supermoto suelen tener una duración mayor que el resto de las competencias promedio, por lo que suelen atraer a un tipo de público un tanto diferente que el resto de las carreras de motociclismo.